En esta ocasión ha sido un pleno de aprobados del carnet de conducir por partida triple: Simeón, con la teórica a la segunda, y Santiago y Joana con teórico y práctico a la primera. El examen fue el día 19 por la tarde ya que están haciendo exámenes para quitar todo el volumen que tienen pendiente por la huelga de hace unos meses.
El primero en examinarse fue Simeón. Para empezar, lo sacaron de la zona y su examen se desarrolló tanto en vía urbana como interurbana. Su principal error fue un desplazamiento lateral: primero giró el volante, luego miró… y tuvo que rectificar porque venía un coche. Como os comenté en mi anterior post, para los desplazamientos hay que recordar las siglas RSM: Retrovisor, Señalización y Maniobra. Una vez rectificado, el propio examinador se lo comentó «no me vale ningún otro orden: ni MSR, ni SRM… es Retrovisor, Señalización y Maniobra. Por suerte, como excepto ese desplazamiento todos los demás fueron correctos, el examinador le dio su apto. El caso de Simeón fue especial porque no hizo todas las prácticas que le aconseje para ir bien preparado a examen, pero tuvo suerte y salvó el examen… ahora a conducir en la vida real.
El segundo en ponerse manos al volante fue Santiago y su examen también se desarrolló tanto en vía urbana como interurbana. Santiago es de esos alumnos que ha aprendido de todos sus fallos en las prácticas para luego poderlos corregir. Su examen fue prácticamente perfecto, simplemente podemos comentar dos puntos. El primero, que se le caló el coche una vez y se puso muy nervioso. No pasa nada porque se os cale el coche una o varias veces, tenéis que controlar los nervios, arrancar y seguir como siempre. Y eso es lo que hizo Santiago. El segundo punto a comentar fue en una rotonda con mucho tráfico. Al ir a salir metió un poco el morro en el carril contiguo (sólo un poco), pero tomó la decisión de no salir y esperar. ¡Perfecto! Si hubiera salido hubiera hecho frenar el vehículo que tenía la prioridad, lo cual puede ser motivo de suspenso. Así que, con un examen casi perfecto, Santiago consiguió también su apto de forma muy merecida.
La última en ponerse al volante fue Joana. Qué decir de ella… en todo momento me hizo caso acerca de las prácticas a realizar y, bajo mi punto de vista, era la más preparada para afrontar la conducción sin instructor. Nada comentar de su examen fue perfecto.
Me gustaría comentar que no solo es importante aprobar el examen del carnet de conducir, es mucho más importante sentirse seguro y bien preparado para poder afrontar el día a día de la conducción.
¡Muchas felicidades a los tres!